A través de la Resolución 219/2015, publicada en el Boletín Oficial, la Secretaría de Energía ordenó que esos usuarios residenciales dejen de percibir el descuento del 50% en la tarifa plena, salvo que acrediten una situación de vulnerabilidad mediante el canal habilitado por la Anses.
La normativa destaca que esta decisión fue tomada tras una evaluación técnica que detectó que habían unos 137.975 CUIT o CUIL con subsidios aplicados de forma simultánea a más de un medidor, lo que sugiere la posesión o uso de múltiples inmuebles y también una condición patrimonial contraria con el nivel más alto de subsidio.
Esta medida busca limitar el alcance de los descuentos automáticos previstos por la Ley 27.637, que rige para los usuarios de gas natural en zonas de bajas temperaturas.
En esa línea, el beneficio del 50% fue destinado a usuarios vulnerables de las zonas incorporadas por la ampliación del régimen de Zona Fría, mientras que el 30% es el beneficio general para el resto de los hogares de esas regiones.
En la disposición, se detalla que se modifica el criterio de inclusión en el registro único de beneficiarios: quienes figuren como titulares de más de un medidor serán asignados directamente al grupo que más debe pagar, sin excepción automática por criterios de vulnerabilidad. Además, aclara que los usuarios podrán presentar evidencia de su situación social a través del “Modelo de Gestión Unificada – Ventanilla Única Social” de la Anses, que evaluará caso por caso para determinar si corresponde restituir el beneficio del 50%.
Por su parte, advirtieron sobre la superposición de beneficios, dado que un mismo usuario puede llegar a recibir simultáneamente el descuento por Zona Fría, los subsidios establecidos por la segmentación tarifaria vigente y la Tarifa Social Federal de gas. Esto complicaría la transparencia de las facturas y genera un uso ineficiente de los recursos destinados al sistema de subsidios.
Esta medida fue aplicada en el marco del “Período de Transición hacia Subsidios Energéticos Focalizados”, que se extiende hasta el 31 de mayo de 2025. Con este esquema, se habilitó a las autoridades a realizar revisiones en los padrones y redefinir criterios de elegibilidad para asegurar que los subsidios lleguen a quienes más los necesitan.
Por último, la emergencia en el sector energético se extiende hasta el 9 de julio de 2025 tras ser prorrogada a finales de 2024. Asimismo, actualmente rige la emergencia pública en múltiples áreas, incluida la tarifaria, hasta diciembre de 2025, lo que le permite a la Secretaría de Energía aplicar modificaciones para reestructurar el sistema de subsidios por vía administrativa